Hoy sangro, pero sangro de verdad, sangro por todo eso que me hizo sangrar desde que soy chiquitita. Porque para empezar a vivir, esta vida nueva, voy a tener que despojarme de todo lo viejo.

Hoy sangro asi, mucho, a borbotones, sin freno, sin cause, es un volcán. Y tengo cada gota, identificada perfectamente. No me voy a esconder en palabras, voy a escribir las cosas como son.
Sangro cosas desde la infancia, mi viejo por supuesto, protagonista de la mayoría.
Sangran mis juguetes rebotando por las paredes de mi cuarto, mientras mi hermana me abrazaba y me tapaba los oídos para que no lo escuche mas.
Sangra la escena que tengo clavada en el pecho de mi viejo pegandole a mi vieja en la calle, y haciendola caer en las baldosas, con su vestido color purpura y su bombacha blanca, si, porque de la caida se levanto el vestido y yo lo recuerdo como hoy.
Sangran las noches y noches y noches de tortura psicologica que vivi, del no servis para nada, del no se para que te tuve, del voy a tirarte por el balcón, del "no me contradigas", de mis gritos hacia él, es tan doloroso gritarle a un padre que para uno esta muerto, porque yo se lo grité, desde los 10 años se lo grite y llore a gritos que se muera.
Sangran mis intervenciones para que deje de golpear a mi mama, mis amenazas de tener q hacerme cargo e ir a denunciarlo por violencia familiar. Y si, a nosotras no nos golpeó directamente con puño porque sabia que venia el reves y lo knockeaba. Pero psicologicamente, a los 6 años uno es mucho mas debil, y las personas mucho mas dominables.
Y asi, recorriendo el sangrado de mi padre, sangro la espalda que siempre me dio, de todas las veces q lo necesite, sangro su falta de amor, sangro su falta de SER PADRE, su falta de HOMBRIA, palabra que jamas supo ni el significado siquiera.
Y por supuesto, y para no ser menos, sangro su muerte, sangro su perversion mas perversa, sangro lo que dejo para nosotras, sangro que no haya podido enterrarlo porque alguien con nombre y apellido se robo el cuerpo y me quito mi derecho de hija, de enterrarlo, de remover la tierra, de escupir esa tierra, de patearlo, no, no me dejaron, no pude. Pero como era de esperar, a una vida perversa, una muerte perversa lo esperaba tambien. Se donde esta enterrado, pero no me animo a ir sola a patearlo, todavia no.
Y gracias a él, sangro a cada hombre que pasó por mi vida, al primero, a la primer experiencia sexual, a Luis, por cojerme y cojerme y cojerme, sin siquiera llegar a conocerme, sangro por dejarme cojer y cojer y cojer x alguien que no me conocía.
Sangro por Javier, por no haber podido dejarme con hombria, y tener que esperar a que yo tome la decisión mientras lloraba sin parar durante semanas viendo que su amor ya no lo tenía.
Sangro por el otro Javier, por haber jugado al novio y amante durante años, para terminar viviendo con otra (igual a mi, x supuesto).
Sangro por todos los "te cojo, me visto y me voy" que pasaron por mi vida (si, son bastantes)
Sangro por Carlos, porque respondia perfecto al modelo de Ruben (mi viejo), y yo sintiendo "mi viejo no me quiso, pero este me va a querer", y me someti a los miedos mas grandes, a las angustias mas grandes, a engordar 20 kilos en dos años de convivencia... nada lograba que yo fuera mas fuerte para soportalo. Ni los kilos, ni el llanto, ni el pedirle por favor.
Sangro por los que no quisieron jugarsela conmigo, por los miedosos que no pudieron con tanta historia negra de mi, o con tantas ganas de superar la historia negra, vaya uno a saber que les dio tanto miedo, porque les di tanto miedo... o porque se los desperte.
Sangro por todos los orgasmos fingidos para satisfacer al otro A QUIEN CARAJOS QUISE SATISFACER??? a ese que no sabia hacerme gozar y por eso tuve que fingir un orgasmo??? como llegue a eso??
Sangro por los momentos horribles que haya vivido en esa vida, en la Natalia miedosa, en la Natalia desatendida por si misma. Sangro por las peleas con mi hermana, por hacerme cargo siempre de sus quilombos y que nunca sepa agradecer (recien ahora viviendo lejos y con una hija le cayeron algunas fichas). Sangro por mi vieja, por su debilidad de no poder terminar un matrimonio a tiempo que nos hubiera ahorrado tanto dolor. Sangro por amigos que me han traicionado.
Sangro por la unica amiga que se me fue, la que me sostuvo en los momentos mas jodidos de mi vida, que venia a Buenos Aires desde Rosario sacudiendo las malas ondas como decia ella, me cuidaba, me hacia masajes, me hacia masajes en el corazon, y se la llevo la Ruta 34 en un accidente de auto. Y la sangro, a Micaelita la sangro, Cande y yo (cande es mi hermana pero mi hermana de alma) la sangramos y mucho.
Sangrar asi me obliga a hacer balance, a sacar todo eso que sangra, y revalorar todo lo que tengo q me hace brillar. Y por suerte es mucho, y lo hice sola, con mis miedos, con mis terrores, con mis ansiedades, con mis faltas, con el amor que tambien despido a borbotones, y por la inteligencia que llevo, que x suerte hace que pueda procesar tanta mierda.
Esta es la nueva Natalia, la que quiere perder todos los miedos, que aceptó tu ayuda para despojarse de los miedos.
Lloro y lloro, pero no me voy a rendir. La otra Natalia, lo hubiera hecho. YO NO.


This entry was posted on 1:36 p. m. and is filed under . You can follow any responses to this entry through the RSS 2.0 feed. You can leave a response, or trackback from your own site.

1 comentarios:

    Anónimo dijo...

    Cada vez que uno sangra es para dejar atrás el dolor. Y cada vez que uno lo deja atrás es porque da un paso adelante. Que es lo que te aflije?

  1. ... on mayo 19, 2008 4:30 a. m.